LA RESPIRACIÓN HUMANA 2da Parte
FISIOLOGÍA DEL SISTEMA
La respiración, al igual que
la digestión, es un proceso de entrada y salida. Es decir, la principal tarea
del sistema respiratorio es permitir el ingreso del aire atmosférico y
expelerlo del cuerpo luego de haber realizado los intercambios gaseosos
correspondientes.
EL CONTROL NERVIOSO DE LA
RESPIRACIÓN
La respiración está
regulada por un Centro nervioso, situado en el bulbo raquídeo. El Centro
respiratorio envía impulsos al diafragma y a los músculos intercostales. Éstos
se contraen y provocan una inhalación. La dilatación pulmonar estimula a los
receptores de los nervios sensitivos, insertos en las paredes pulmonares. Desde
los receptores parten impulsos que inhiben en Centro respiratorio. En
consecuencia los músculos respiratorios se relajan y los pulmones vuelven a su
posición original. El resultado de este proceso es la exhalación.
El proceso
|
Respiratorio comprende
|
de tres etapas
|
Ventilación pulmonar
|
Entrada de aire a los pulmones y
su posterior salida.
|
Mecánica respiratoria
|
Respiración externa
|
Intercambio de gases entre el alvéolo y la sangre.
|
Hematosis
|
Respiración interna
|
Intercambio de gases entre la
sangre y la célula.
|
Respiración celular
|
SABIAS QUE?
Si bien la respiración
en forma involuntaria, nosotros podemos realizar inspiraciones profundas o
cortas, para lo cual, nuestro cerebro envía órdenes a los músculos pectorales y
esternocleidomastoideos.
LA RESPIRACIÓN MECÁNICA
Se denomina así al
proceso cíclico que mantiene constante la cantidad de aire e los pulmones.
Abarca dos fases: la inspiración, que introduce el aire atmosférico en los
pulmones, y la espiración, que lo expulsa. Para ello, los órganos del sistema
respiratorio cuentan con estructuras anexas: el diafragma, los músculos
intercostales y los músculos abdominales son las que desempeñan las funciones
más importantes.
Estructuras que colaboran
con la respiración
|
Características
|
Función
|
Diafragma
|
Es un músculo esquelético que divide el cuerpo
en dos cavidades: la abdominal (que aloja el estómago, el hígado, el
páncreas, etc.) y la torácica (que contiene el corazón y los pulmones).
|
Durante la inspiración, se
aplana, y aumenta el diámetro vertical de la caja torácica.
|
Músculos intercostales
|
Es un grupo de músculos que se ubica entre las
costillas, a ambos lados de la caja torácica.
|
Se contraen y se relajan durante los movimientos
respiratorios. Al contraerse, aumentan el diámetro anteroposterior y
transversal de la caja torácica.
|
Músculos abdominales
|
Son músculos que forman la pared
del abdomen.
|
Empujan el diafragma hacia
arriba, y comprimen la cavidad abdominal.
|
El diafragma es un tabique de tejido muscular y tendinoso que divide la
cavidad torácica de la abdominal. Las fibras musculares se reúnen en un tendón
central, que es el encargado de tirar hacia abajo y ampliar la cavidad
torácica. El diafragma presenta una serie de agujeros por los que pasan diferentes
estructuras, como la aorta, el esófago y la vena cava inferior. Los músculos
intercostales están insertos entre las costillas, y forman las paredes del
tórax.
INSPIRACIÓN
Cuando
inspiramos, el diafragma y los músculos intercostales externos e internos se
contraen. En la inspiración forzada (provocada por una actividad intensa y de
alta exigencia respiratoria) intervienen, además, los músculos pectorales y los
esternocleidomastoideos.
Al
contraerse el diafragma, su centro desciende, lo que produce un aumento
vertical de la caja torácica, y empuja las vísceras abdominales hacia abajo. La
contracción de los músculos intercostales produce la elevación de las costillas
y proyecta el esternón hacia adelante. De esta forma, los diámetros
anteroposterior y transversal de la caja aumentan, y hacen que aumente el
volumen de los pulmones. El aumento de volumen crea un vacío y, por lo tanto,
una diferencia de presión con respecto a la presión atmosférica. De este modo,
aire atmosférico ingresa para lograr un equilibrio.
ESPIRACIÓN
Se produce cuando el diafragma y los músculos intercostales se relajan
(vuelven a su posición habitual). Es decir, el diafragma se eleva y las costillas
descienden, por lo que disminuye el volumen de la caja torácica y, en
consecuencia, de los pulmones. La
disminución del volumen presiona el aire de los pulmones u hace que salga al
exterior. También contribuye la contracción de los músculos abdominales, que
comprimen la cavidad abdominal y empujan el diafragma hacia arriba.

VOLÚMENES DE AIRE
Para medir la cantidad
de aire desplazado de los pulmones durante los movimientos respiratorios, se
utiliza el espirómetro. Los volúmenes de aire que mide el
espirómetro son los siguientes:
- · Volumen de aire corriente: cantidad de aire respirado y espirado en un acto respiratorio.
- · Volumen de reserva espiratorio: aire que sale forzadamente del pulmón luego de una espiración normal.
- · Volumen de reserva inspiratorio: cantidad de aire que puede entrar al pulmón forzadamente, luego de una inspiración normal.
- · Volumen residual: cantidad de aire que queda en los pulmones, después de una espiración máxima (no sale nunca).
Estos
volúmenes de aire se suman y forman las siguientes capacidades pulmonares.
- · Capacidad pulmonar total: cantidad de aire contenida en los pulmones después de una inspiración forzada.
- · Capacidad vital: máximo volumen de aire que puede ser eliminado de los pulmones, después de una inspiración forzada.
- · Capacidad inspiratoria: Máximo volumen de aire que puede ser inspirado, después de una espiración común.
- · Capacidad residual: máxima cantidad de aire que queda en los pulmones, después de una espiración forzada.
SABIAS QUE?
Es conveniente que las
personas fumadoras o expuestas a sustancias irritantes, así como las que sufren
de desórdenes respiratorios, realicen una espirometría cada 3 ó 5 años.
LA ESPIROMETRÍA
|
Es un estudio que consiste en medir los volúmenes pulmonares
y valorar la función de los pulmones. Es muy útil para:
Determinar si los pulmones reciben, mantienen y
utilizan el aire normalmente;
Detectar una obstrucción bronquial;
Revelar alteraciones en la etapa precoz de una
enfermedad del pulmón, cuando el examen clínico y radiológico todavía son
normales;
Determinar la gravedad de una enfermedad del
pulmón;
Evaluar la progresión de una patología o la
eficacia de un tratamiento.
Para este estudio se emplea un
espirómetro, que consiste en un aparato con un tubo, por donde la persona
expulsa la cantidad máxima de aire posible, de acuerdo con las pautas que da
el personal especializado (puede ser expulsar todo el aire posible en el
tiempo que sea necesario, o hacerlo lo más rápido posible). El espirómetro
registra los valores, que se comparan con los normales.
|
HEMATOSIS Y RESPIRACIÓN CELULAR
La hematosis
consiste en el intercambio gaseoso entre la sangre y el aire alveolar. Los capilares
sanguíneos (ramificaciones de las arterias pulmonares) llegan a los alvéolos
pulmonares con sangre carboxigenada. Los gases atraviesan los epitelios
pulmonar y capilar por difusión pasiva, es decir, pasan del lugar de
mayor al de menor concentración:
- · En el alvéolo, el dióxido de carbono está menos concentrado que en la sangre y, por está diferencia de concentración pasa el líquido sanguíneo al alvéolo;
- · El oxígeno está más concentrado en el alvéolo que en la sangre, por lo cual pasa del alvéolo al líquido sanguínea.
- La sangre que llega a cada alvéolo a través de los capilares arteriales (ramificaciones de la arteria pulmonar) es carboxigenada (pobre en oxígeno).
- El aire alveolar es oxigenado (pobre en CO2).
- Por difusión, el O2 pasa del alvéolo a la sangre a través de los capilares venosos y, luego, por la vena pulmonar al corazón, que la impulsa a todo el cuerpo.
- Por difusión, el CO2 que llega por los capilares arteriales a cada alvéolo pasa a éste y, luego de recorrer las vías aeríferas, sale al exterior durante la espiración.
RESPIRACIÓN CELULAR
Entre la sangre y los
tejidos corporales también se produce un intercambio gaseoso semejante al de la
hematosis. En este caso, el oxígeno se difunde desde la sangre, donde está en
mayor concentración, hacia las células, y el dióxido de carbono, desde la
célula a la sangre.
RELACIÓN ENTRE EL SISTEMA
RESPIRATORIO Y EL SISTEMA CIRCULATORIO
|
Los bronquios se ramifican en el interior de los alvéolos.
La sangre carboxigenada llega a los alvéolos a través de
las ramificaciones de la arteria pulmonar.
La sangre oxigenada sale de los alvéolos por las ramas de
las venas pulmonares, que la llevan al corazón y de allí a todo el cuerpo.
|
ARTERIAS Y VENAS PULMONARES
La arteria pulmonar se divide
en dos ramas: las arterias pulmonares derecha e izquierda. Cada una de estas
arterias pulmonares se introduce en el pulmón correspondiente, cruzando la cara
anterior del tronco bronquial principal.
·
Arteria pulmonar derecha
Una
vez que entra acompañado al tronco bronquial principal, da ramas que son, en
conjunto, satélites de las colaterales del tronco bronquial principal. Estas
colaterales nacen escalonadas a lo largo de toda la arteria pulmonar. Las
primeras están destinadas al lóbulo superior y, generalmente, son dos y reciben
el nombre de arteria mediastínica del lóbulo superior y arteria cisural del
lóbulo superior. Las arterias del óvulo medio –frecuentemente dos- son la
arteria superior constante y la arteria externa del lóbulo medio. Las arterias
del lóbulo inferior se desprenden de la porción terminal de la arteria
pulmonar.
·
Arteria pulmonar izquierda
Una
vez que entra al pulmón acompañado al tronco bronquial principal, da ramas
colaterales. Las primeras están destinadas al lóbulo superior;su número es muy
variable, con un promedio de tres. Las arterias del lóbulo inferior de originan
de los bronquios segmentarios correspondientes. Estas ramas arteriales se
ramifican como los bronquios, hasta que forman, en la superficie de los
alvéolos, una red capilar perialveolar, que da nacimientos a las primeras ramas
de origen de las venas pulmonares. Las venas pulmonares nacen en la red capilar
perialveolar. Sus ramas de origen o venas perilobulillares reciben también las
vénulas bronquiales, procedentes de los bronquios pequeño, y las venas
pleurales, procedentes de la pleura visceral. Las venas perilobulillares se
unen para formar troncos cada vez más voluminosos, con un trayecto
independiente de los bronquios. Drenan finalmente en las venas que se distribuyen
por la periferia de los diferentes segmentos. Las venas de cada pulmón se unen
por último en dos troncos: las venas pulmonares propiamente dichas que
desembocan en la aurícula izquierda.

Comentarios
Publicar un comentario